Sin entrar en las grandes controversias de los escándalos internacionales, ya sea por dopaje, muertes repentinas o enfermedades crónicas, el uso de esteroides en una u otra medida es una realidad que debe estudiarse y regularse con honestidad y limpieza.
En lo personal como entrenador certificado, miembro de la asociación de físico y fitness del estado y promotor deportivo, jamás estaré a favor de prescribir el uso indiscriminado de esteroides sintéticos, mucho menos en la juventud que todavía, por su desarrollo, produce la suficiente testosterona y hormona de crecimiento de manera natural.
Sin embargo, también conocedor de la realidad intramuros del deporte, es una obligación casi moral la de remitir con un médico especializado a quienes por alguna razón tomen la decisión de utilizarlos o deseen investigar al respecto, a lo cual agregaría que debe ser bajo estricta vigilancia médica y estudios de la salud de quien los va a utilizar.
Y adicionalmente a una estricta supervisión médica, un segundo aspecto a considerarse obligadamente es la apropiada elección de marca y distribuidor, para evitar ser presa de fraude en la piratería, que por brindar “precios bajos” pongan bajo un riesgo mayúsculo la salud del atleta.
En otras palabras y para que no se malinterprete, podemos resumir: que el uso de esteroides en todos los deportes es una realidad clandestina; que bajo ninguna circunstancia deberían usarlo menores de 21 años; que sólo bajo supervisión médica pueden ser utilizados y, que deben aplicarse sólo aquellos de marcas reconocidas y originales.
Mayor pecado sería negarse a una realidad y continuar promoviendo el mercado negro que además, daña no sólo la imagen del deporte, sino la salud de la juventud y propicia que entrenadores sin escrúpulos hagan de ello su negocio principal.
En los gimnasios, el mejor consejo debe ser, entrenar intenso y tener una excelente alimentación a base de proteínas, carbos y grasas naturales, algunos complementos, como su nombre lo dice, sólo para “completar” la comida, no para sustituirla y alejarse de malas influencias en el uso de esteroides o tener la información adecuada y profesional acerca de los mismos.
Recuerden, cuerpo, mente y espíritu en equilibrio, por una vida saludable.
Hasta la próxima semana.
