Todo indica que este año, igual que en todo el país, sobre todo a estas alturas del calendario, la clase política de Puebla parece más preocupada por la sucesión presidencial del 2012 y las elecciones concurrentes al senado y a diputados federales, con la esperanza de entrar en una de las listas de afortunados.
Y uno de los más preocupados o al menos a la expectativa sin duda debe ser el Gobernador del Estado, Rafael Moreno Valle, cuyo precandidato presidencial del PAN, Ernesto Cordero, parece no subir en las preferencias del público, pese a la macro-campaña oficial por apoyarle.En cambio, donde andan muy optimistas es en el Palacio Municipal, donde el alcalde de la capital, Eduardo Rivera, desde el principio se la ha jugado con la hoy puntera del PAN, Josefina Vázquez Mota, a quien al parecer sólo el método del dedazo podría dejar fuera de la candidatura presidencial a finales de año.
Las preguntas hoy en los círculos políticos son ¿qué pasará con Moreno Valle ante la eventual candidatura de Vázquez Mota? En este sentido hay que recordar que una aliada del gobernador es Elba Esther Gordillo, una de las detractoras de la exdiputada federal panista, por lo que surge la otra interrogante: ¿jugará el mandatario estatal de la mano de la profesora, para apoyar por debajo de la mesa al virtual candidato del PRI, Enrique Peña Nieto, como se afirma en muchas partes?
Mientras en el PAN hay dos estructuras trabajando fuerte en el apoyo a sus precandidatos presidenciales, donde aparentemente sigue reinando el caos es en el PRI, donde más que reconstruir las bases de ese partido tras la derrota del año pasado, los líderes parecen estarse peleando su presencia en listas para las candidaturas del 2012.
Para el senado los analistas siguen anotando al exgobernador Mario Marín Torres, al excandidato derrotado Javier López Zavala y la exalcaldesa Blanca Alcalá, aunque en opinión de otros por ser ellos caras muy vistas que además seguro podrían aspirar a un cargo en el comité de campaña nacional del candidato tricolor, surgen nombres nuevos para las senadurías como el excoordinador de diputados del PRI José Othón Bailleres, Laura Zapata o Lucero Saldaña.
Aunque en el juego político sucesorio, hoy se multiplican las listas, crecen las filtraciones a prensa de nombres y más nombres, la realidad es que todos en verdad están quietos y muchos de ellos viendo como acercarse cuanto antes a Enrique Peña Nieto, a quien ya hacen candidato del PRI a la Presidencia de la República y que seguro él y su gente de confianza serán los encargados de palomear, no sólo en Puebla, sino en todo el país, las candidaturas federales de quienes le acompañaran en cada estado a realizar campaña.
Así que mientras la ciudad y el estado sigue lleno de baches, un transporte urbano deficiente, una preocupación creciente de la gente por la inseguridad, los gobernantes y políticos de la entidad piensan en como hacerle para lograr sus candidaturas, sin mucho interés aparente en las necesidades de los electores.
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