Apenas hace una semana en este mismo espacio escribíamos sobre el uso político electoral de los sistemas judiciales y de los aparatos de justicia estatales y federal, que seguro tendrán un rol protagónico hacia las elecciones del 2012, cuando esta semana en Puebla un escándalo “político-mediático-judicial” tiene en los primeros planos de la prensa de nueva cuenta al exgobernador Mario Marín Torres, cuyo verdugo momentáneo es el Procurador de Justicia de Puebla, Víctor Carrancá Bourget.
El fiscal del estado ha emprendido una serie de acciones y declaraciones en contra de la administración marinista por presuntos expedientes del Organo Superior de Fiscalización relacionados con las cuentas públicas del anterior mandatario priísta, con lo que algunos ya dan por descartado el “pacto de no agresión” entre el mandatario actual del PAN, Rafael Moreno Valle y su antecesor.
Más allá de los análisis jurídicos y de la ruta judicial que este episodio siga, porque de ello seguramente se encargarán los abogados de las partes involucradas, la opinión pública atenderá de cerca este capítulo, para constatar que no sea una “cortina de humo” o una acusación sin fundamentos que termine al final con un “usted disculpe” y en realidad se trate de un caso donde la justicia se aplique sin tintes políticos.
Lo que llama la atención de los analistas políticos es el “timing” con que este episodio mediático se realiza, justo cuando aparentemente la campaña presidencial desde Los Pinos ha arremetido en todo el país en contra de los gobiernos actuales o pasados del PRI.
Como en política nada es casual, destaca que la noticia se difunda en Puebla, cuando a nivel nacional el Presidente Felipe Calderón de nueva cuenta es el centro de atención por sus declaraciones internacionales en contra del PRI, acusándolos (aparentemente sin mayor fundamente que algunos reportes de prensa) de haber pactado en el pasado con el crimen.
Algunos piensan que estas ofensivas mediáticas tienen dos objetivos: legitimar el gobierno de Calderón ante la escasa aceptación pública que tiene su precandidato presidencial, Ernesto Cordero y, marcar sus fortalezas para en su momento sentarse a negociar con la elite priísta ante la posibilidad inminente de perder las elecciones en el 2012.
Destaca entonces el hecho de que sea Puebla uno de los estados justamente que la emprendan en contra del PRI, cuando hasta ahora aparentemente cohabitaban sin agresión en la entidad, dado que Moreno Valle ha sido uno de los principales promotores públicos de Cordero, el delfín de Calderón, sin dejar de lado que el Procurador Carrancá está identificado plenamente con el regente del DF, el perredista Marcelo Ebrard.
Finalizo diciendo que mientras Calderón y sus gobernadores aliados la emprenden en contra del PRI y tratan de posicionar a como de lugar a Cordero, la exlegisladora federal panista, Josefina Vázquez Mota, cada vez gana más adeptos dentro y fuera de su partido, por lo que como declaró Ana Teresa Aranda a Milenio Puebla, “todavía van a pasar cosas en el PAN”.
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